Enfoque
En múltiples ocasiones, como en la sentencia T-881 de 2002, la T-436 de 2012 y la C-143 de 2015, la Corte Constitucional de Colombia ha reiterado la importancia del reconocimiento constitucional de la dignidad humana bajo tres distintos significados: i) la dignidad entendida como autonomía o como la posibilidad de diseñar y desarrollar un plan vital, es decir, la idea de “vivir como se quiera”; ii) la dignidad entendida como satisfacción de ciertas condiciones materiales concretas de existencia, o sea, “vivir bien”; y iii) la dignidad entendida como respeto a la integridad física y moral de las personas, esto es, “vivir sin humillaciones”. Lo que se acaba de reportar es el resultado al cual el Campesinado se ha siempre puesto como resultado final de la gran lucha a la cual ha tenido que enfrentarse. A pesar de la sencillez de las palabras de la Corte Constitucional, se hayan muchísimas dificultades y retos que América Latina, más en general, y Colombia, específicamente, han tenido que enfrentarse para poder obtener hoy en día un instrumento jurídico internacional que protegiera los derechos de los campesinos y campesinas con la Declaración sobre los Derechos de los Campesinos y Otras Personas que Trabajan en las Zonas Rurales, emitida en noviembre de 2018 por la Asamblea General de las Naciones Unidas. En Colombia el reconocimiento de los derechos de los campesinos está reportados en la Constitución del 1991 en el artículo 64 de la misma, así como modificado por el Acta Legislativo 01 de 2023 por medio del cual se reconoce al campesinado como sujeto de especial protección constitucional”, cuya atención hacia la igualdad está reportada desde el principio: “Es deber del Estado promover el acceso progresivo a la propiedad de la tierra del campesinado y de los trabajadores agrarios, en forma individual o asociativa. (…) Los campesinos y las campesinas son libres e iguales a todas las demás poblaciones y tienen derecho a no ser objeto de ningún tipo de discriminación en el ejercicio de sus derechos, en particular las fundadas en su situación económica, social, cultural y política”.Varias son las razones de las dificultades antes mencionadas, entre ellas las desventajas que una mala reputación de estos ha influido en su imagen. Describir un campesino como un sujeto ocioso o como un trabajador ineficiente, en un contexto en el que la tarea consiste predominantemente en la producción de materias primas y alimentos, ha incidido directamente en el escaso reconocimiento de sus aportes a la construcción y al desarrollo de la nación, construyendo la base para asumir que los recursos públicos deben dirigirse a otros grupos sociales. Así mismo, la representación de los cultivadores de coca como criminales ha legitimado su exclusión de los espacios de decisión en torno a las políticas antinarcóticos y el uso de la represión estatal en su contra. Se trata de un pequeño adelanto de toda el análisis que se expondrá durante la ponencia del presente congreso.
Rubén Domínguez Toledano
Comentó el 28/10/2023 a las 19:44:30
Muy buenas tardes, Alessandra. Te felicito por tu ponencia, con una temática verdaderamente interesante y con tan alta repercusión en la política y estabilidad política y social colombiana. Dicho lo cual, tu conferencia me lleva a plantearme, ¿en qué grado la cuestión y reivindicaciones del campesinado colombiano terminará por influir en la decisión de la Asamblea General de Naciones Unidas en la Declaración de los Derechos del Campesinado de 2018? Como reconocido ignorante en esta cuestión concreta, me suscita plantear a través de qué mecanismos el campesinado colombiano pudo gestar una exposición de sus reivindicaciones a nivel internacional. No sé si se haría a través de grupos internacionalistas por los derechos de este sector (agrupándose con otras voces presentes en la región latinoamericana) o, por el contrario, este movimiento no gozó de representación para la redacción de esta declaración internacional. Dicho lo cual, me sumo a la pregunta de la compañera Inés para conocer la trascendencia de este precepto en el devenir de la población campesina colombiana, especialmente en el marco del gobierno del Gustavo Petro y sus iniciativas por la reforma agraria. Muchas gracias
Inés Abigail Benítez Herrera
Comentó el 18/10/2023 a las 03:27:34
Hola Alessandra, un saludo y felicitaciones por tu ponencia, mi pregunta es, ¿Esta Declaración sobre los Derechos de los Campesinos, ha marcado un antes y un después en la vida de los campesinos en Colombia?
Muchas gracias
Hugo Neves Pérez
Comentó el 16/10/2023 a las 20:25:43
Buenas tardes Alessandra y muchas gracias por tu ponencia excepcional sobre el campesino como figura jurídica, un asunto de total actualidad.
Mi pregunta sería sobre ¿cuáles son las dificultades y retos específicos que América Latina, en general, y Colombia, en particular, han enfrentado para obtener un instrumento jurídico internacional que proteja los derechos de los campesinos?
Muchas gracias por tu exposición y espero tu respuesta sobre este tema de tanta relevancia en la región tratada.
Un saludo,
Hugo.
Alessandra Esther Castagnedi Ramirez
Comentó el 17/10/2023 a las 17:59:09
Buenas tardes Hugo,
ante todo agradecerte la pregunta y el interés mostrado en el argumento. Se podía haber explicado el proceso de reconocimiento del campesinado con mas detalles, sino que el video hubiera sido demasiado largo. me preguntas sobre las dificultades que se han encontrado en Colombia en razón de esta lucha, ya que Sudamerica es demasiado general. La lucha por el reconocimiento tiene su bases en varios procesos particulares, que bien integran dificultades y las razones que han motivado a una lucha importante por parte de esta clase social:
- la conciencia de las ventajas y limitaciones de la politica de reconocimiento de derechos diferenciales a grupos étnicos en la búsqueda de acceso a bienes materiales, espacios de decisión política y estima social, por lograr mejores condiciones;
- las tensiones sociales entre individuos, poblaciones y organizaciones incluidas dentro de las categorías étnicas, por un lado, y aquellos que no lo estaban, por el otro. Estos conflictos se dieron en el marco de disputas por la tierra, el acceso a derechos sociales, la presencia de cultivos ilícitos, la relación con actores armados, el acceso a recursos estatales, la política ambiental y diferencias ideológicas que se expresaron en la cercanía o membresía a organizaciones sociales y partidos políticos diversos, entre muchos otros problemas y cuestiones del mundo rural. Todo esto tuvo como consecuencia que individuos, poblaciones y organizaciones rurales tendió a profundizar un sentimiento de desconocimiento entre quienes se identifican como campesinos de su condición de sujetos políticos y de derechos;
- los pequeños y medianos productores fueron duramente afectados por la implementación del modelo neoliberal en el país. Las políticas de privatización y apertura económica condujeron a un menor respaldo del Estado a la producción, así como a un aumento progresivo de las importaciones de alimentos y, en consecuencia, a la pérdida de acceso a una parte considerable del mercado interno. Por lo tanto a problemas de vieja data, como la distribución inequitativa de la tierra, las precarias condiciones de trabajo en el campo, la baja inversión estatal, la asistencia técnica insuficiente y las difíciles condiciones de acceso a mercados, se añadió la ausencia de mecanismos efectivos de control sobre los usos del suelo, la conservación del medio ambiente y el acceso al agua.
- en el mismo arco temporal, se hicieron públicas las negociaciones entre el Gobierno colombiano y las guerrillas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia – Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el Ejército de Liberación
Nacional (ELN). Con ello, algunas organizaciones campesinas participaron en debates en torno a la paz y el desarrollo rural. Dicha situación favoreció la inscripción de algunas de sus demandas en los pliegos de negociación, principalmente en el caso de las negociaciones con la primera de esas guerrillas. Asimismo, se
gestaron nuevas condiciones para la movilización social, lo que contribuyó a que las organizaciones campesinas ganaran relevancia como sujetos políticos.
Este cuadro ilustra las dificultades y las razones que han motivado los campesinos a unirse, a pesar de las dificultades, como grupo social para el reconocimiento de sus derechos así como mostrado en el art. 64 de la Carta Constitucional Colombiana.
Espero haber sido bastante esaustiva.
un saludo
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